''Qué importa ser poeta o ser basura''
Decía Extremoduro.
Yo elegí basura.

sábado, 25 de octubre de 2014

Amor en lata.

Hoy ya no te quiero.

Hoy me quiero a mí, a mi rostro, a mis labios y a mis ojos. Hoy soy capaz de comprender que la que tiene que aguantar mis días malos, mis tonterías, mis enfados y mis manías tengo que ser yo, no otra persona. Tú no tenías que aguantarme, tenías que quererme. Yo nunca he buscado ser alguien que otra persona tenga que soportar; yo busco hacer feliz a otra persona.

Para soportarne ya estoy yo, que convivo conmigo misma.

Por eso, hoy me voy a querer a mí.

Mi amor es caro, no pienso malgastarlo, ni tampoco perder mi tiempo en cosas que no merecen la pena. Prefiero malgastar mi tiempo siendo feliz.

Espero que tu seas feliz con ella. De verdad, lo espero. Espero incluso que llegue a quererte la mitad de lo que yo te quise, aunque ya me parece mucho; pero es que, chico, no sabes lo mucho que te quise y todo lo que habría estado dispuesta a dar por ti. Habría esquivado balas por ti.

Pero adelante, si te gusta ese otro amor falso no te culpo: sigue comprando amor del que viene en lata, sigue buscando amor en las esquinas las noches de sábado. Pero, ¿sabes qué? Poco conozco del amor, pero sé lo sufiente para decirte que ese amor no es del bueno, y que, todas las noches, al llegar a tu cama, seguirás igual de solo. Yo ya no voy a estar ahí para jugar contigo entre las sábanas, para que nuestros cuerpos desnudos se abracen. No, no estaré. Ni hoy, ni mañana, ni nunca.

Siento tener que ser yo quien te lo diga, pero ya nadie te va a llevar a ver las estrellas nunca más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario